Así será el futuro gobierno de McCain, o el de Obama

Hace ocho años yo decía que prefería que ganara Bush a Gore, porque prefería un tonto que cometiera errores a un malvado inteligente como había sido Clinton.

El tiempo me ha dado serios motivos para comerme mis palabras, es cierto que Bush ha cometido errores de un calibre dificil de imaginar, pero también es cierto que esos errores nos han costado miles de muertes y millones de personas reducidas a la miseria.

La administración Bush II ha caído sobre la humanidad con una ferocidad de dimensiones bíblicas. Y así será recordada por la Historia. El reinado de Kerry imposiblemente podría haber sido tan nefasto, aposteriori, estoy convencido de ello, como también estoy convencido de que el próximo gobierno de los EEUU, sea dirgido por Obama o por McCain, necesariamente mejorará la situación.

Desde este punto de vista, quizás debíamos ser optimistas. Ni si quiera la victoria de McCain podría empeorar las cosas. El hartazgo de los votantes (y el mundo financiero) de los excesos de Bush y sus nefastas consecuencias, ha empujado a McCain a oponerse a sus peores extremos. El expansionismo militar ha alcanzado techo con Irak, el neoliberalismo a ultranza está herido de muerte. Son buenas noticias.

Pero aquellos que han provocado el mundo en que vivimos, están ahí todavía. Los grupos financieros reniegan de los excesos militares y liberales del gobierno de Bush, pero buscarán la forma de resucitar el liberalismo de otra forma. Los evangelsitas han dado la espalda a Bush por la degradación de la economía de los más pobres, pero le dan su apoyo a McCain por su integrismo moral. ¿Cómo podrán grupos liberales y antiliberales convivir en el mismo gobierno? Muy sencillo, impulsando el liberalismo a la vez que se contenta la moral retrógada evangelista.  McCain nos traerá una carga fiscal más alta para los pobres y persecuciones al aborto, los preservativos y los homosexuales.

Obama por su parte es el amigo de los europeos. Es guapo, joven, negro y ¿de izquierdas?. Pero luego resulta que cuando habla de economía, nos habla de liberalismo económico. Y cuando habla de reformas sociales, no dice nada más que vaguedades. No debemos olvidar en cualquier caso, que Obama ha ganado las subastas primarias más caras de la historia, cabe preguntarse de donde han salido los 52 millones de euros que ha gastado este señor para ser candidato por el partido democrata. Es cierto que gran parte de ese dinero debió salir de electores democratas de a pie, ilusionados por su proyecto. Pero esta cantidad nunca podría haberse reunido únicamente de esta forma. La pregunta sería ¿quien ha pagado ese dinero? o mejor todavía ¿por qué lo han pagado?

Que nadie se engañe, el gobierno de Obama seguramente será, de producirse, semejante al de Clinton. Con tímidos guiños sociales acompañados de grandes recortes mientras se intenta arreglar el desaguisado financiero que ha dejado la administración Bush II.

En política exterior, gane quien gane, creo que sé lo que va a suceder. Se moderarán los excesos del gobierno de Bush. Desde luego la invasión de Irán no se tendrá ni en consideración y cabe dentro de lo posible (aunque no se debe dar por seguro en una coyuntura de petroleo carísimo) que se produzca la salida de Irak.